lunes, 23 de mayo de 2016

DENISE LEÓN



YOUR THINGS

I

En el último
cuarto
estamos sentados
los tres
-rodeados-
por tus
cosas.
Fueron guardadas
con cuidado
por manos
con bordes
luminosos.

Ahora
sólo una urgencia
que oscurece
los días
y
la falsa promesa
de tus pasos

en el cuarto.

SILVINA CHACON



EN EL MAR SE HUNDE UN RELÁMPAGO

II

Un hijo
reclama su nave, la nave entiende
se debe al hijo y
lo acuna lo lleva
en su vientre viaje y
sonríe y declara
hay viento, nos lleva buen viento.

Un rumbo, dos rumbos
la nave una nuez, se parte y sonríen
felices los ignorantes.

No el viento, hijo. Yo.
Yo sostengo las velas blancas y
también sostengo las velas negras.

Asombro y gracia es el hijo.

Detrás el vendaval.

Suspira la madre
arría bandera, iza bandera
el hijo el mástil.

¿Hasta dónde madre?
¿Hasta dónde hijo?

Una mañana de naves
ligera, la nave busca viento
un soplo extravío o soplo de fuego
y ella mira la hiena parida.

Relámpago.

En el mar se hunde un relámpago y
sabe cómo.

Cómo cortar las amarras.